El Fondo Monetario Internacional (FMI) difundió este martes la actualización de su informe de Perspectivas Económicas Globales, en la que mantuvo en abril su proyección de enero para la Argentina, al estimar que la actividad económica caerá un 2,8% este 2024; a la vez que precisó que la inflación anual se ubicará en torno al 150%.

Según el documento del organismo, presentado en el marco de su Reunión de Primavera en Washington de la que participará Luis Caputo desde este miércoles, el descenso del Producto Bruto Interno (PBI) de este año en el país se debe a las medidas de ajuste tomadas por el gobierno de Javier Milei.

Sin embargo, el economista jefe de la entidad, Pierre Olivier Gourinchas, quien se encargó de dar a conocer la evaluación, opinó en conferencia de prensa que “el progreso” de Argentina “hasta ahora ha sido realmente impresionante”, y destacó que “las autoridades han podido registrar un superávit fiscal por primera vez en más de una década”.

“Por supuesto, esto llevará algún tiempo y requerirá una implementación política firme. Es necesario hacer mucho más, y es necesario hacer mucho más en una escala más amplia”, señaló el miembro del Fondo.

En este sentido, el reporte -que también detalló que en 2023 hubo una recesión del 1,6%- proyectó un cambio de tendencia en 2025. Para entonces, se espera un crecimiento de la economía del 5% y una reducción de la inflación anual al 45%. Respecto del desempleo en el país, el organismo de crédito estima que este 2024 se elevará de 6,6% a 8%, para reducirse el próximo año a 7,5%.

A nivel mundial, el pronóstico es que la actividad económica crezca un 3,2% durante 2024 y 2025, al mismo ritmo que en 2023; mientras que auguró una “ligera aceleración” del 01,% para las “economías avanzadas”.

Tras la difusión de este informe trimestral, el ministro de Economía viajará este martes a Washington con el objetivo de participar el miércoles 17 de las Reuniones de Primavera del FMI y el Banco Mundial. Fuentes oficiales detallaron que tendrá “una nutrida agenda” que incluirá su presencia en los paneles y cónclaves de los organismos y del G20.

Además, Caputo -quien estará acompañado por el secretario de Finanzas, Pablo Quirno- tiene previsto mantener encuentros bilaterales con representantes de las entidades financieras y del Tesoro de los Estados Unidos, “en los que se continuará dialogando sobre las reformas que se están desarrollando en Argentina para ordenar la economía”. El objetivo es acercar posiciones para delinear un nuevo acuerdo que habilite en los próximos meses un mayor desembolso de dólares para el país.

El secretario de Trabajo brindó detalles sobre el contenido del proyecto de reforma laboral que se presentará en la nueva Ley de Bases y que sería enviada al Congreso en los próximos días.

El funcionario explicó que se incluirá “todo lo que que contenía el DNU” y que la mayoría de los partidos políticos están a favor de la modernización, que el secretario prefirió definir como “mejora laboral” ya que “no se está cercenando ningún derecho”.

“Tenemos dos puntos fundamentales. El primero es acompañar la baja inflacionaria. Y el segundo, la generación de empleo”, explicó Cordero en diálogo LN+.

“Quisiéramos enviar un proyecto que acompañe la ley de Bases y que esté subido al Pacto del 25 de Mayo. Ese proyecto tiene todo el contenido del DNU y el contenido de lo que estaba en la ley de Bases como el blanqueo y la moratoria previsional”, detalló

“La modernización es tan potente que es acompañada por las fuerzas políticas”. “El proyecto del radicalismo va en línea con lo presentado por el Gobierno. Por eso diversas fuerzas se suman, pero todos piensan lo mismo. Hay incluso proyectos más enérgicos”, explicó el abogado laborista.

“Los argentinos estamos haciendo un esfuerzo histórico incalculable. Todos se despiertan para ir a trabajar y hacen un gran esfuerzo para combatir la inflación. La batalla cultural está siendo cada vez más visible y el trabajo dignifica a la persona. Va más allá de las personas. Es un camino que avanza y no va a cesar. Todos los actores están entendiendo todo esto”, evaluó.

Según informó el INDEC, el mismo modelo de hogar requirió de $358.049 para no caer debajo de la línea de indigencia.

El Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) publicó este viernes el informe de marzo sobre la Canasta Básica Total (CBT) y la Canasta Básica Alimentaria (CBA). Según el primer índice, una familia compuesta por cuatro integrantes necesitó de $773.385 para no ser considerada pobre, mientras que el mismo modelo precisó $358.049 para no caer en la línea de indigencia.

Además, el organismo detalló que un individuo necesitó de $250.286 y $115.873 para no ser pobre o indigente, respectivamente.

De esta manera, la CBT se incrementó 11,9% en relación a febrero y 304,4% interanual, en tanto que la CBA aumentó un 10,9% respecto al mes anterior.

Estas cifras, significaron el registro más bajo de crecimiento en el 2024. En enero se evidenció, en la CBT, un 20,4% más que el mes anterior, mientras que el aumento para febrero fue del 15,8%. Por su parte, la CBA tuvo incrementos del de 18,6% y 13,1%, en el primer y segundo mes del año, sucesivamente.

Para determinar la Canasta Básica Total se amplía la Canasta Básica Alimentaria con bienes y servicios no alimentarios.

Este viernes, el INDEC también publicó que el Índice de Precios al Consumidor fue del 11% respecto a febrero y del 287,9% interanual, con un alza acumulada de 51,6% en el primer trimestre del 2024.